Abrir este nuevo año de reseñas hablando de Las siete camas de Lirón -el último álbum que lleva la firma de Susanna Isern- es sin duda un buen comienzo, ¿verdad?
Llevo ya mucho tiempo queriendo compartir con vosotr@s nuestra experiencia familiar con respecto a este cuento, ya que ha sido uno de los libros que regalé a las peques en Navidades, y que trata de un tema que nos toca muy de cerca y que también se nombra mucho cuando se habla de Crianza Respetuosa: el colecho, o dicho de otra manera, el dormir acompañad@s.

Las siete camas de Lirón
Autor@s: Susanna Isern, Marco Somá
Edirorial: Nubeocho

Edad recomendada: a partir de 3 años

Trama

Lirón no puede dormir solo y cada noche va a dormir a casa de uno de los animales que habitan el bosque. Los animales no se sentían a gusto con esto de despertarse y descubrir a Lirón en sus casas, y le piden que se quede a dormir en su cama. Lirón entonces decide irse a dormir a casa del Lobo, con el riesgo que eso conlleva. Los animales le salvan del potencial peligro y le preguntan por qué se había atrevido a tanto. lirón les explicará que tiene miedo de dormir solo. Los animales entonces les acogen en su casa turnándose para acompañar a Lirón. Finalmente Lirón dormirá en su cama cuando una pequeña musaraña llegará a compartir con él su cama.

Contenidos y Valores

En nuestra casa hemos practicado y seguimos practicando el colecho. A parte de los múltiples y reconocidos beneficios que tiene el colecho, nos parece una experiencia preciosa de la que disfrutamos en partes iguales adult@s y pequeñas. Nuestra mayor ya duerme sola desde hace tiempo, pero no por obligación, sino porque se siente a gusto así, aunque seguimos compartiendo nuestro ritual de lectura antes de ir a dormir y le hacemos compañía casi todas las noches hasta que se quede dormida.

La peque más peque, sin embargo, sigue necesitando mi presencia en la cama. En este periodo más que antes incluso, porque ha empezado a tener determinados miedos que no la dejan dormir tranquila. Y allí estamos cada noche compartiendo la almohada ;)

Cuando conocí el cuento de Lirón pensé que para Serena podría ser una lectura muy interesante y efectivamente así ha sido. Guardaré en los años el recuerdo de la expresión que se dibujó en su cara cuando descubrió que Lirón tenía miedo a dormir solo. Interrumpió el cuento y dijo: “Oh! Mamá, Lirón tiene miedo a dormir solo!” En esa frase estaba su frase, en esa frase estaba su miedo por fin reflejado en un personaje, sin juicios, que le permitía mirar hacia sus adentros.

Así que para nosotr@s Las siete camas de Lirón representa un cuento de introspección, que ofrece un espacio de reflexión, comprensión y sobretodo aceptación del miedo a dormir solo y por ende a todos los miedos que podamos sentir con respecto al abandono. No se trata de un cuento que avala ese miedo, y tampoco que lo enjuicie: el miedo se cuenta, como experiencia emocional verdadera, sin más.

En un primer momento, Lirón no consigue expresar su miedo y por no hacerlo no recibe el acompañamiento que necesita. De allí que actuará de una forma no adecuada poniendo en peligro su misma vida, buscando ese acompañamiento en la casa de Lobo, que en este caso representa la figura temible, el peligro, como en todo cuento clásico.

En esta narración, la aparición de este personaje con su connotación bien típica no me ha incomodado, porque refleja su naturaleza sin ninguna picaresca añadida, y porque representa un peligro realmente grave para Lirón, tan peligroso como una infancia no acompañada, como unas necesidades emocionales insatisfechas, como un miedo minimizado o enjuiciado como excesivo.

Chapó a esta representación: resume con una metáfora muy sencilla de entender lo que puede acarrear en nuestr@s pequeñ@s la ausencia de un acompañamiento amoroso, respetuoso hacia sus emociones. Un mensaje que nos pone en alerta: si en la infancia no damos esa seguridad, esa presencia que se nos demanda como figuras de apego, podemos poner en peligro a nuestr@s pequeñ@s, ya que buscarán satisfacer esas necesidades de una forma no oportuna.

La reacción de los animales cuando descubren el miedo de Lirón es de escucha y aceptación: tod@s se muestran complacientes hacia Lirón, que no casualmente es representado como el más pequeño de todos los animales. Si los más pequeñines piden amparo y compañía, necesitan amparo y compañía, y si lo necesitan significa que está a nosotr@s ofrecerle nuestra presencia, nuestro cariño.

El miedo a dormir sol@s es un miedo transitorio, que durará durante un tiempo determinado y que podemos acompañar ofreciendo esa presencia que nuestr@s pequeñ@s nos demandan, sin forzarles a superar esa etapa antes de tiempo, viviendo una angustia muy dura de entender y que buscará otras válvulas de escape que les sean permitidas, o no.

La complacencia de los amigos de Lirón, su atención hacia la necesidad y hacia la situación del pequeño son unos valores imprescindibles en toda familia y en toda relación de amistad. Al principio los animales expresan su molestia con respecto a las apariciones de Lirón, porque no saben de su miedo y se sienten privados de su libertad y de su privacidad. Pero en seguida éstas pasan en un segundo plano cuando descubren cual es la verdadera necesidad de Lirón.

Priorizar, quizás sea esto el verbo más importante que he aprendido con la maternidad. Ser capaz de considerar la importancia de cada cosa en base a las otras, sin vivir encerrad@s en ningún dogma, siendo flexibles y estando a la escucha de las verdaderas y profundas necesidades de acompañamiento de nuestr@s peques.

Y así es Lirón quien establecerá el tiempo durante el cual necesita de la presencia de alguien que acompañe su sueño, mientras no sea él mismo capaz de dar esa presencia a quien lo necesite. Alguien más pequeño que él, representado en el cuento por la musaraña.

Este es el ciclo de crecimiento que vivimos y que es proprio de cada ser: primero necesitamos de que nos cuiden y luego, una vez hayan sido satisfechas nuestras necesidades emocionales, seremos capaces de cuidar.

Y así se construye un círculo amoroso, en el que damos porque hemos recibidos, damos sin reservas, damos porque podemos. Un mensaje muy importante que trasciende la crianza de l@s hij@s propri@s, sino que toca la humanidad misma.

Ilustraciones

Marco Somá vuelve a enamorarnos. Después de haber ilustrado el maravilloso álbum El momento perfecto (lee la reseña aquí), no podíamos que estar más que expectantes por conocer esta joya. Vuelven a enamorarnos los tonos azulados, los decorados vintage de las casas que poblan el bosque, los detalles súper cuidados de cada pequeño o gran objeto que aparece en el cuento: ¡nada es dejado al caso!

Para qué y para quién

Un cuento que os recomiendo mucho en el caso de que estéis practicando el colecho: no hay muchos cuentos donde se muestre la posibilidad de acompañar el sueño y normalizar esa opción familiar me parece muy interesante.
Un cuento con estructura acumulativa y protagonizado por animales: dos características que lo hacen muy adecuado a peques de 3, 4, 5 años que podrán así seguir con más facilidad la historia.
El amor familiar y la amistad son sin duda dos valores de base de este cuento, que lo hacen una historia perfecta para compartir con nuestr@s pequeñ@s, justo antes de ir a dormir.

Las siete camas de Lirón forma parte del catálogo de nuestra tienda, así que si te ha gustado este álbum y quieres ampliar con él tu biblioteca personal, puedes pedirlo aquí en este enlace!

Espero que la reseña os haya gustado, ¡el viernes más!
Besotes,