Estoy orgullosa de presentaros el nuevo álbum de nuestra editorial: KOINOBORI Cree en ti.
Desirée Acevedo y Rebeca Luciani vuelven a colaborar para crear otra maravilla, la segunda de la colección Un mundo un corazón que se estrenó con Sawabona.
Ambas historias tienen un valor enorme para las mujeres que han trabajado en ellas. Y cuando se trabaja en algo que para nosotros es importante, el resultado es algo valioso.
Koinobori cuenta una historia de superación, tenacidad, paciencia y esfuerzo.
Pero también cuenta el amor de una madre que acompaña, que cuenta, que anima y que sostiene. Cuenta la historia de cada persona, que en los momentos de dificultad atraviesa la corriente contraria de la vida nadando con más intensidad, con determinación, porque sabe en el fondo de su corazón que puede.
Koinobori es el nombre de las banderas en forma de carpa que ondean en Japón el día de los niños y representa el deseo que le hacemos a la infancia de poder sortear las dificultades de la vida. Una tradición nipónica que nos ha parecido tremendamente significativa e importante y por eso ha entrado a formar parte de esta colección que quiere traer a nuestra cultura lo que viene de otras para enriquecerla.
Hoy lanzamos este nuevo libro con una promoción especial que os permitirá tener esta joya DEDICADA por sus dos autoras, Desirée Acevedo y Rebeca Luciani. Y además con una mravillosa lámina personalizada de regalo, una postal y el material para crear vuestro propio koinobori.
Ahora sí: vamos a descubrir Koinobori – Cree en ti
Autora: Desirée Acevedo; ilustradora Rebeca Luciani
Editorial: La Cuentería Respetuosa
Edad Recomenada Orientativa: a partir de 4 años
Trama
Daiki está enfrentándose a una recuperación. Lleva un tiempo sin poder caminar y su madre le ayuda cotidianamente en sus ejercicios y en sostener también su ánimo. Un día en el que Daiki se encuentra especialmente triste, su madre Jin le cuenta la leyenda del Pez Koi y del Dragón Dorado. El pez Koi – la carpa- es un pez capaz de nadar a contracorriente sorteando rocas y cascadas. Como premio por alcanzar la meta, los dioses lo transforman en un dragón dorado. Daiki, inspirado por el esfuerzo del pez koi, trabaja a diario para su recuperación.
El día del Kodomo no hi, la fiesta de niñas y niños, está preparado para hacer librar su Koinobori en el cielo, junto al de sus amigos. Las banderas en forma de pez Koi se izan porque se desea a niñas y niños que crezcan sanos y fuertes capaces de enfrentarse a las dificultades de la vida. Ese día Daiki podrá por fin levantarse de su silla de ruedas y dar sus primeros pasos con la ayuda de unas muletas.
Contenidos y Valores
La historia de Daiki, es sin duda una historia que resonará en muchas madres. Muchas, si no todas, hemos tenido que ayudar a nuestros hijos en algún momento de su vida a enfrentarse a una dificultad, tanto física como emocional. Un camino de sanación que ha requerido de tiempo y constancia para poderse llevar a cabo.
De hecho esta historia nace inspirada por una experiencia análoga vivida por la propia autora junto con su hijo.
Una vivencia que les ha tocado muy en el fondo y que ha sido el disaparador para una creación tan bella.
Los nombres de los protagonistas de esta historia no están escogidos al azar, sino que son indicativos de lo que representan estos personajes en la historia.
Daiki significa chico de gran valor, con coraje, valiente.
Jin significa gentileza, ternura. Porque es con ternura que acompaña a su hijo en este proceso tan complejo.
Aquí, como en Sawabona, nos encontramos con una forma de acompañamiento de las personas adultas hacia la infancia que pone por delante la escucha de las necesidades de los pequeños, el entendimiento de su realidad y de su dolor y, a partir de allí, la ayuda que ofrecen va a indicar como lo más importante siempre reside en el interior de uno mismo.
Sin creer en las capacidades propias, sin el esfuerzo, la evolución y el crecimiento no serían posibles.
Ese esfuerzo y la paciencia se materializan en nuestro cuento a través de la representación del paso de las estaciones: nuestra historia empieza en otoño invierno y termina hacia la mitad de la primavera. El kodomo no hi, el día de los niños y de las niñas, se celebra en Japón el 5 de mayo, y es en ese día que se cierra esta historia pero no la recuperación de nuestro protagonista. Entendemos que sigue su proceso, pero vemos como va evolucionando.
Así nos llega un mensaje esperanzador, positivo. Nuestro ánimo se levanta con el final de esta historia así como se levanta el koinobori en el cielo. Y automátiamente nos llevamos a nuestra propia piel la fuerza de Daiki.
Ilustraciones
Haría falta una reseña a parte solo para hablar del trabajo de Rebeca Luciani en este álbum. La pericia en cada una de las ilustarciones, las ambientaciones, la maestría en el uso el color, la delicadeza, la capacidad de plasmar el mundo emocional de los proagonistas, así como sus mundos internos impresiona.
Las perspectivas que hay en cada “escena” hace de este un álbum casi cinematográfico, pero a la vez increíblemente arraigado en imagenes que evocan tradiciones antiguas, bien anteriores a la llegada del cine.
La capaciad de transmitir ensoñación, calidez, tristeza, miedo, pero a la vez la no-renuncia… qué dificil es expresar todo esto. Y cómo lo consigue Rebeca. Cada ilustración es una invitación a entrar en su mundo. A bailar con ella los colores y los perfumes de Japón. A sentir la nieve caer delicadamente en el pelo recogido de Jin, a percibir la verticalidad de la cascada que observa Daiki en sus sueños.
Este álbum es arte.
Para qué y para quién
Imposible limitar el público de una lectura tan grande. Pero sí os diré que toca tantos temas y situaciones que veréis con facilidad el porqué es un álbum que todo el mundo amará.
Es una lectura que habla de un momento de dificultad, momentos que todos tenemos que enfrentar en la vida, por una u otra razón. Así que nos será imposible no empatizar con Daiki y a la vez con su mamá que, a través del poder de una historia, conecta con su hijo. El personaje de Jin nos recuerda que no solo habrá ocasiones en las que necesitaremos ayuda, sino también podremos ofrecerla. Desarrollamos así nuestra empatía, esa tensión a entender y escuchar el otro y su mundo emocional.
Un álbum que celebra el vínculo, el apego seguro, que es tan importante para la construcción de una autoestima sana.
Es un álbum que acompañará a niños y niñas que tienen que enfrentarse a una recuperacion física, a una hospitalización y que podrán ver reflejado en la experiencia de Daiki lo que le espera: un tiempo dedicado a ese cuidado para finalmente estar mejor.
Koinobori es una historia que habla del valor que todos albergamos en nuestro yo. La fuerza que tenemos frente a la dificultad, esa resiliencia que nos permite seguir en la adversidad.
Un libro que puede leerse ya con 4 años y que nos emocionará a lo largo de toda la vida.
Esta semana podrás pedir aquí tu libro de Koinobori DEDICADO por su autoa Deirée Acevedo y Rebeca Luciani y además recibirás de regalo:
- Lámina personalziada con el nombre de tu peque
- Postal con ilustración del cuento
- Material apra realizar la manualidad de crear tu propio Koinobori.
Si el libro va dedicado a más de una persona se enviarán tantas láminas personalizadas y tanto material de manualidad para que cada niño o niña pueda tener su propria lámina y crear su propio koinobori.
¡Porque cada uno de nosotros tiene siempre que recordar la importancia de creer en uno mismo!